ASTRONOMÍA | Publicado en 'Science'


Kepler logra captar la 'música' de las estrellas

Rosa M. Tristán
Foto - Recreación de uno de los 'soles' localizados por Kepler.| 'Science'


El telescopio espacial Kepler, de la NASA, ha logrado captar las vibraciones sonoras que emiten las estrellas de la constelación hacia la que dirige su lente, la Cygnus-Lyra, en la Vía Láctea. Los espectros que ha enviado a la Tierra han permitido identificar una población de 500 estrellas del mismo tipo que el Sol.

Antes del lanzamiento del Kepler, en 2009, sólo se conocían unas 25 estrellas como el Sol en la galaxia, dado que la atmósfera terrestre impedía detectarlas, pero eso cambió con el telescopio espacial, cuya misión básica es encontrar planetas susceptibles de ser habitados.

Pero sus datos están dando más resultados que los esperados para la astrofísica. Con el hallazgo de estos soles, publicado en la revista 'Science' esta semana, no solo se conocerán mejor los procesos de formación y evolución de las estrellas, sino que sus conclusiones pueden cambiar algunas de las teorías mejor asentadas en la comunidad científica.

Lo que Kepler ha captado son variaciones minúsculas en el brillo estelar que son la manifestación de oscilaciones o vibraciones que se producen por ondas acústicas -sonido- atrapadas en el interior de las estrellas.

Antoni Jiménez, del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) y uno de los dos coautores españoles, junto a Clara Régulo, lo explica con una metáfora musical: "El espectro de vibración de un violín es distinto al de un saxofón u otro instrumento. Escuchando la música podemos identicar qué instrumento es y del mismo modo, escuchando los sonidos de las estrellas podemos conocer sus características".

Con los espectros sonoros, han podido averiguar su radio, su masa, su estado evolutivo, etcétera, y han descubierto que, entre el medio millar, hay soles más jóvenes y más viejos que el Sol. Ello permitirá a los astrofísicos reconstruir su pasado y aventurar su futuro.
Los 'ladrillos' del Cosmos

Pero además de ayudar a conocer los procesos de formación y la evolución de las estrellas, que son los 'ladrillos' que contruyen el conjunto del Universo, esta música estelar, que según Jiménez suena como un murmullo constante, ha servido para probar si las teorías que se tenían son correctas.

Y la conclusión es que lo referente a los modelos sobre los radios si son correctos, pero los relativos a las masas estelares, sin embargo, no se corresponden con lo que se preveía y este es un dato fundamental para la evolución de estos astros.

Desde que Kepler fue puesto en órbita también ha logrado identificar 1.235 posibles planetas, de los que 65 tienen un tamaño similar al de la Tierra y cinco están en una zona que podría ser habitales, por la distancia a la que están de su estrella. Sus datos deben ser contrastados con telescopios terrestres.

http://www.elmundo.es/